ZAPOPAN, JALISCO (14/AGO/2010) . - El quinteto, reconocido como “La Voz del Pueblo”, demostraron en Zapopan por qué siguen siendo “Los Jefes de jefes”, con 31 temas interpretados anoche
Nadie en Jalisco quería perderse el concierto de “Los Jefes de jefes”, ya que pasarían lista y habría que estar en el Auditorio Telmex.
Hasta ahí, en el coloso universitario de Zapopan atendieron el rugido poco más de ocho mil personas, procedentes principalmente de los municipios que conforman la Zona Metropolitana de Guadalajara.
Pasados 30 minutos de las 21:00 horas, anoche Los Tigres del Norte aparecieron sobre el escenario ataviados en un traje azul, con aplicaciones en hilo de oro y botas brillantes, además de sus respectivos instrumentos, con los que por cerca de tres horas complacieron a sus admiradores.
Nadie en Jalisco quería perderse el concierto de “Los Jefes de jefes”, ya que pasarían lista y habría que estar en el Auditorio Telmex.
Hasta ahí, en el coloso universitario de Zapopan atendieron el rugido poco más de ocho mil personas, procedentes principalmente de los municipios que conforman la Zona Metropolitana de Guadalajara.
Pasados 30 minutos de las 21:00 horas, anoche Los Tigres del Norte aparecieron sobre el escenario ataviados en un traje azul, con aplicaciones en hilo de oro y botas brillantes, además de sus respectivos instrumentos, con los que por cerca de tres horas complacieron a sus admiradores.
El público era muy variado, ya que en las afueras del inmueble había desde niños, hasta roqueros y amantes del género grupero, quienes con su chamarra de cuero, texana o botas vaqueras delataban su gusto musical. Aunque también pudo ser un concierto familiar.
El rugido de los tigres comenzó con La perra, La tumba falsa, La banda del carro rojo, temas con los que de inmediato conectaron con los asistentes a una de sus inmejorables presentaciones que han realizado en suelo jalisciense, por el despliegue de recursos técnicos que les permite un escenario como el Auditorio Telmex, ya que echaron mano de cinco pantallas, más una que se extendió a lo largo del escenario de manera frontal para complementar las proyecciones.
“Gracias por complacernos con su presencia. El destino nos juntó. La pasión y ustedes nos mantienen unidos”, señaló Jorge Hernández, voz principal y acordeonista del quinteto originario de la localidad Rosa Morada, Sinaloa.
Aunque se esperaba un lleno total en el coloso de Zapopan, a la cita apenas llegaron poco más de ocho mil personas con boleto pagado, por lo que el total recaudado en taquilla se destinará íntegramente a la construcción del Santuario de los Mártires.
Y precisamente, en presencia del cardenal Juan Sandoval Íñiguez, Eduardo, Jorge, Hernán y Luis Hernández, al lado de Oscar Lara, interpretaron sus mejores éxitos, como Contrabando y traición, El tahur, La puerta negra, Golpes en el corazón, Ni parientes somos, América, La tumba falsa, Pedro y Pablo, entre otros que se sumaron a las canciones contenidas en su más reciente producción discográfica La granja.
Los de Sinaloa, pero avecindados desde hace varios años en Estados Unidos, hicieron suyo el escenario en una actitud complaciente, preguntando al público cuál canción querían escuchar y enseguida la interpretaban.
Sin grandes derroches de energía y con 41 años de trayectoria en la industria de la música, demostraron por qué siguen siendo los consentidos del género grupero o mejor dicho, por qué se les conoce con el mote de “Los Jefes de jefes”. Alegres, entusiasmados y de buen humor interpretaron hasta 31 temas, con los que llegaron a rasgar el reloj cuando éste marcaba la medianoche.
EL INFORMADOR/ OMAR CASTAÑEDA
El rugido de los tigres comenzó con La perra, La tumba falsa, La banda del carro rojo, temas con los que de inmediato conectaron con los asistentes a una de sus inmejorables presentaciones que han realizado en suelo jalisciense, por el despliegue de recursos técnicos que les permite un escenario como el Auditorio Telmex, ya que echaron mano de cinco pantallas, más una que se extendió a lo largo del escenario de manera frontal para complementar las proyecciones.
“Gracias por complacernos con su presencia. El destino nos juntó. La pasión y ustedes nos mantienen unidos”, señaló Jorge Hernández, voz principal y acordeonista del quinteto originario de la localidad Rosa Morada, Sinaloa.
Aunque se esperaba un lleno total en el coloso de Zapopan, a la cita apenas llegaron poco más de ocho mil personas con boleto pagado, por lo que el total recaudado en taquilla se destinará íntegramente a la construcción del Santuario de los Mártires.
Y precisamente, en presencia del cardenal Juan Sandoval Íñiguez, Eduardo, Jorge, Hernán y Luis Hernández, al lado de Oscar Lara, interpretaron sus mejores éxitos, como Contrabando y traición, El tahur, La puerta negra, Golpes en el corazón, Ni parientes somos, América, La tumba falsa, Pedro y Pablo, entre otros que se sumaron a las canciones contenidas en su más reciente producción discográfica La granja.
Los de Sinaloa, pero avecindados desde hace varios años en Estados Unidos, hicieron suyo el escenario en una actitud complaciente, preguntando al público cuál canción querían escuchar y enseguida la interpretaban.
Sin grandes derroches de energía y con 41 años de trayectoria en la industria de la música, demostraron por qué siguen siendo los consentidos del género grupero o mejor dicho, por qué se les conoce con el mote de “Los Jefes de jefes”. Alegres, entusiasmados y de buen humor interpretaron hasta 31 temas, con los que llegaron a rasgar el reloj cuando éste marcaba la medianoche.
EL INFORMADOR/ OMAR CASTAÑEDA
2 comentarios:
Nuevamente.. Club de Fans Mi Curiosidad, estuvo presente en este evento. Esperamos a Gaby, para mas noticias!!!!
Estuvo padrisimo el concierto de LOS JEFES DE JEFES en Zapopan Jalisco,, fue un espectaculo totalmente diferente,,,
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